El punto (que puede ser cualquier objeto o persona) es el lugar donde se centra la mirada del
observador y tiene una gran atracción visual. Si su posición es el área central, da la impresión de que esta gira a su alrededor. Cuando su posición
se ubica en un extremo, se rompe con el equilibrio y de esta manera conseguimos dar importancia a otros elementos de la composición.
Cuando tenemos dos puntos principales en una composición,
automáticamente se forma una línea psicológica para el ojo y
crea dinamismo al conjunto.
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